Semana política

9 de noviembre de 2011.

Hola, adjuntamos los sucesos más interesantes de la semana.

1. El fracaso del Imperio.

2. Elecciones y modelo económico.

3. Michoacán en clave 2012.

EL FRACASO DEL IMPERIO. Tarde o temprano los imperios pierden batallas, no importa su capacidad para hacer la guerra o sus recursos. Es así. Quizá la historia marque como una de estas batallas la operación conocida como Rápido y Furioso, una transferencia secreta de armas de Estados Unidos a México. Tanto ha pesado esta percepción, que el propio Eric Holder, fiscal general de los EEUU, durante una comparecencia ante el Comité Judicial del Senado norteamericano, declaró que la operación fue “fallida” en su totalidad y “nunca debió de haber existido”. En su opinión, tanto el concepto como la ejecución del plan fue un desastre y se han tomado medidas “para que no se vuelva a repetir”. Agentes de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos recibieron órdenes de la Administración para permitir el tráfico de armas desde Estados Unidos a México con el fin último de detectar a grandes traficantes de drogas en el momento de usarlas. Obviamente, salió gato por liebre: la gran mayoría de esas armas se perdió el rastro y el resto comenzaron a aparecer en crímenes a ambos lados de la frontera. La operación encubierta quedó expuesta a la luz pública -y por tanto fuera de juego- cuando se hallaron dos de esas armas en el lugar donde fue asesinado el agente de fronteras Brian Terry, en Arizona en diciembre de 2010. Holder ha mantenido siempre que no tuvo conocimiento de la operación hasta las últimas semanas de su desarrollo y que cuando lo tuvo ordenó una investigación de forma inmediata. “Por desgracia, sentiremos sus efectos durante muchos años, porque las armas que se perdieron durante esta operación siguen apareciendo en escenas de crimen tanto aquí como en México”, dijo el fiscal general, cuya cabeza piden ahora algunos senadores republicanos. El hecho de que Holder haya insistido en que él también desea saber por qué las armas que debían de haber estado bajo vigilancia acabaron en manos de los cárteles ha despertado el escepticismo del senador republicano Charles Grasslev, que ha liderado el interrogatorio y sostenido que el fiscal general recibió al menos cinco informes sobre la estrategia a seguir en julio de 2010, bastante antes de lo que el responsable de la Justicia norteamericana reconoció en una audiencia en la Cámara de Representantes en mayo. La semana pasada, el director de la división anticrimen del Departamento de Justicia, Lanny Breuer, reconoció haber sabido de la operación Rápido y Furioso en abril de 2010 pero dijo no haber informado a Holder sobre ella. Esto confirmaría, algunas de las hipótesis de desconfianza entre los propios organismos de inteligencia de EEUU. Sin embargo, desde este lado de la frontera, el silencio ha sido norma, más allá de algunas voces en el legislativo. ¿Qué sucede cuándo un gobierno calla sobre la intervención en sus fronteras? ¿Por qué siempre se nos pide confiar en EEUU si esa confianza ellos no la otorgan? ¿Qué significa, para México, esta derrota de los EEUU frente a los carteles? También, ¿ha evaluado ya el gobierno esos efectos a los que se refiere el fiscal Holder?

ELECCIONES Y MODELO ECONÓMICO. Los procesos electorales en cualquier nación, son causa de movimientos en el desempeño económico de las mismas; impactan no sólo los hechos que se manifiestan en particular en los mercados financieros y cambiarios, sino también en las expectativas de los agentes económicos, tocando directamente el comportamiento del sector real de la misma. Dentro de la literatura convencional en la materia, hay poco o nada escrito acerca de cómo se relacionan ésta y los mercados con las luchas políticas en periodos electorales. Sin embargo, sabemos que la velocidad con que se mueven las variables políticas, suelen ser mucho mas rápidas y aun más inestables; ya que, el ciclo económico suele presentar tendencias más prolongadas en el tiempo. Por el contrario, los ciclos políticos suelen tener picos y precipicios más pronunciados por el mismo entorno de inestabilidad que caracteriza a los procesos electorales en nuestro país. De tal manera que, la palabra clave en todo este tema, es sin duda la estabilidad, ya que sin ella, la pobreza y la ingobernabilidad tienden a aparecer de manera constante, y representan un lastre para cualquier Estado. Sabemos también, que en términos generales los gobiernos intentan influir en las condiciones de la economía en los meses previos a las elecciones mediante políticas de corte expansionista, que producen efectos positivos en el corto plazo; tales como, un mayor crecimiento y menor desempleo, bajas tasas de interés, y un marcado aumento en la demanda agregada; sin embargo, en el periodo post-electoral genera desbalances, que obligan a pagar la factura a costos muy altos. De tal forma que, se da una expansión del gasto en el año electoral y la consecuente contracción en el siguiente. En México, se realizarán elecciones federales en julio próximo, donde se convocará a los electores que conforman el padrón electoral de nuestro país, a cumplir su mandato ciudadano ante las urnas; se elegirán 12 gobernadores; así como, renovación de cámaras de diputados y elección de ayuntamientos en varios estados de la República. Hay que considerar que la transición y la lucha política durante las próximas elecciones, debe ser transparente y pondrá a prueba a la reforma electoral más reciente; del mismo modo, y más importante aún, debemos “evitar los conflictos post-electorales”, ya que eso representaría un verdadero riesgo para el país generando inestabilidad, misma que puede frenar la recuperación económica; producto de la crisis financiera de 2008.

MICHOACÁN EN CLAVE 2012. Nunca hubo un estado que convocara a sus ciudadanos a las urnas con tanta incertidumbre. Con más de tres millones de electores, el estado de Michoacán En los comicios, en los que se renovarán 113 alcaldes y el Congreso local, compiten por la gubernatura Luisa María Calderón, hermana del presidente Felipe Calderón; Silvano Aureoles, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), y Fausto Vallejo, del Revolucionario Institucional (PRI). Los tres aspirantes llamaron al voto en la recta final de una campaña que se vio empañada por el asesinato del alcalde del municipio de La Piedad, Ricardo Guzmán Romero, y el retiro de la contienda de varios candidatos a alcaldías y a la legislatura por el clima de inseguridad. Y es que Michoacán, que cuenta con un amplio litoral en el océano Pacífico y zonas montañosas, es escenario de una ola de violencia atribuida a los carteles de la droga, en particular a la guerra que libran La Familia y Los Caballeros Templarios, antes aliados. Aún con todo ello, diversas características están convirtiendo al estado en un laboratorio electoral para las elecciones presidenciales de 2012: en primer lugar, es una de las pocas entidades con una disputa tripartidista real, por lo que el voto de los electores indecisos será determinante; en segundo lugar, mostrará el impacto de la inseguridad en la decisión electoral de los ciudadanos y; por último, establecerá con mayor claridad la capacidad real del Gobierno Federal para impulsar la campaña de un candidato panista que se encontraba por debajo, sustancialmente, en las encuestas. El PRD en Michoacán presenta un desgaste de poder como consecuencia de las pugnas internas del partido -tanto a nivel nacional como local- y la mala gestión del gobierno de Leonel Godoy en términos de desarrollo económico e incidencia delictiva. Como resultado, el bastión históricamente perredista se ha convertido en un estado en el que ningún candidato o partido tiene un apoyo electoral abrumador. Mientras que casas encuestadoras como el Gabinete de Comunicación Estratégica ponen a Luisa María Calderón 10 puntos por arriba de Fausto Vallejo, candidato a gobernador del PRI, Reforma y Excélsior tienen a la candidata panista en tercer lugar. Cabe resaltar, que el PAN en el estado no es visto como el culpable del problema de inseguridad. De hecho, el electorado parece identificar al partido y al Gobierno Federal como la alternativa de mano dura y solución al problema. Esto vislumbraría la posibilidad que al PAN le vaya mejor en estados ocupados por fuerzas militares -institución con mayor aprobación ciudadana en el país. El PRI, por su parte, se posiciona bien ante el problema de inseguridad y, sobre todo, respecto a la incapacidad de gobierno del PRD. El caso de Luisa María Calderón es interesante. Con un apoyo menor al principio de la campaña, su creciente ascenso en las encuestas es resultado de al menos dos fenómenos: por un lado, existe una alta expectativa del efecto que generará ser hermana del Presidente, tomando en cuenta que en el estado Felipe Calderón tiene una alta popularidad; por otro lado, Luisa María Calderón ha logrado posicionarse en el discurso de seguridad, aún cuando es el mayor problema que enfrenta la administración panista a nivel nacional; finalmente, el género se vuelve una opción de cambio que presentar al electorado. Si Luisa María Calderón llega a ser elegida gobernadora, se mostraría que el tema de seguridad puede ser usado a favor del candidato panista, aún cuando los índices de criminalidad sigan incrementándose; que una mujer puede generar una expectativa en el electorado distinta y; que el Presidente puede no ser un pasivo en la formación de un candidato. Sin duda, reflexiones interesantes para 2012.

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